¿Es GADU un Demiurgo?
Alcoseri
El Demiurgo es una entidad que, sin ser
precisamente Dios, impulsa al universo dándole vitalidad y movimiento, pero
está bien podría no ser tan benigna, pero tampoco tan maligna. Hay unos cuantos
problemas que constantemente han preocupado a los filósofos, a los teólogos y
porque no también a nosotros los masones, que se presenta generalmente como una
dificultad para resolver, lo que sucede en el mundo, y es el origen del Mal,
nadie precisa de hecho una respuesta contundente al fenómeno del Mal, es de hecho
un obstáculo para las filosofías todas, la mayoría de los filósofos y sobre
todo los teólogos expresan, ¿Cuál es el origen del mal en el universo? Sobre
todo aquellos que consideran a la Creación del Universo como la obra y sustento
directa del Dios Único y Verdadero, y que, en consecuencia, estarían obligados
a responsabilizarle a Dios el bien y el mal que sucede aquí en este mundo. Dios
no puede, sin dejar de ser bueno, querer que el orden, que la armonía general,
sean reemplazados por el mal: y el imaginar un mundo mejor, que algún día debe
reemplazar al nuestro, es acusar a Dios de haber faltado a la bondad hacia el
orden actual de las cosas. A tenor de ese sistema, la generación de los seres o
necesariamente: tampoco pude continuar así, pues, una vez comenzada la
creación, Dios no puede destruirlo para formar otro. Además, Dios no es la
causa inmanente de todos los seres ni el custodio de cada mente a obrar bien o
mal, ni su causa creadora directa en el sentido que, tan sólo es un gran
soberano arquitecto, el Demiurgos, y tal es el efecto del término del cual
Filón de Alejandría se sirve habitualmente “Dios no está bajo la influencia de
las leyes del Cosmos, y no solamente por encima sino completamente aparte de
toda la creación” Dios para la masonería sería sólo el Arquitecto de Universo,
más no su creador y sostenedor, algún otro u otros serán los responsables de la
obra, contándonos entre ellos a nosotros los masones.
El hombre de todos los tiempos sospecha
de la existencia de una inteligencia no humana, que dirige y controla ciertos
designios de la creación, una inteligencia elevada sí, pero que no
necesariamente buena ni mala, ni divina, pero tampoco bestial. Podríamos caer
en el error de llamara un Egregor, pero no, ese Demiurgo esta antes de la misma
formación de los Egrégores mentales humanos. Tampoco el Demiurgo es perfecto,
ni infalible, pero sus poderes trascienden en mucho a los pertenecientes a los
hombres más sabios. Podemos decir que es la inteligencia de la naturaleza,
decimos que la naturaleza es sabia, algunos le llaman Demiurgo, madre
Naturaleza. Estudiaremos la palabra Demiurgo, proviene de la palabra usada en
Atenas para designar a un Trabajador para la gente, el artesano u orfebre que
proveía a los Demos, o ciudadanos atenienses, con los instrumentos de bienestar
y cultura. La palabra fue tomada mucho más tarde por Aristóteles para quedar en
lugar del Gran Artífice, el poder que crea y mantiene la vida en el planeta
Tierra. “de ahí pudiera porvenir el mote masónico de Gran Arquitecto”. En los
días de Aristóteles la tierra era el componente central del mismo Universo. El
Sol, la Luna y las estrellas eran luminarias que giraban alrededor del planeta
Tierra. Incluso los mismos Dioses vivían cerca de la Tierra.
Era natural pensar que el Gran Artífice
era el principal motor inteligente y la fuente trascendental de la cual fluía
toda la existencia. Ahora la idea geocéntrica ya no tiene sustento científico
alguno. Estamos obligados a pensar muy diferente acerca de una inteligencia no
humana, si es que la hay, y no pensar que es hecha a nuestra imagen sino más
bien en otro orden- PERO AL FIN UN SER QUE FUE DELAGADO A LLEBAR A CABO LA OBRA
UNIVERSAL, al menos aquí en este planeta Tierra. La ciencia de los profanos, ya
comienza a sospechar de una inteligencia que ha venido modificando ciertos
patrones del ADN, a esta la comienzan a llamar, El Diseño Inteligente, que da
cuenta de un diseñador inteligente, muy al estilo de Nuestro Gran Arquitecto
del Universo.
Hoy gracias a la luz que nos llega a los
telescopios vemos orden en el mismo Universo tiene un orden inteligente, los
grupos de galaxias, grupos de estrellas, por espectros sabemos que hay
moléculas incluso orgánicas por el aire y en la tierra. También sabemos que las
galaxias se alejan unas de otras y que todo esto estuvo una vez todo en un
punto formando algo indiferenciado Bueno en los primeros instantes del
Universo, aparece el orden, aparecen los fotones, otras partículas, mas tarde
protones y más adelante se formarán hidrógenos. Todo esto se ordenará aún mas
formado estrellas galaxias y otros cuerpos. ¿Qué es lo que hizo que este
Universo sea así de ordenado y no un caos enorme? En alguna cosmogonía aparece
Uno que separa la luz de las tinieblas (aparecen los fotones) en fin, ordena
las cosas.(que intuición maravillosa la de estos antiguos
"pensadores")¿Qué ser movió esa partícula trazando una espiral aurea
y ordenó el Universo? El tema de Demiurgos o también llamados dioses bajos. Me
llama la atención la concepción que tenían los antiguos Cataros, exterminados
en su gran numero en la Cruzada Albigense (Francia) 1209.
Ellos concebían este mundo gobernado por
un Demiurgo, llámese Jehovah (antiguo Testamento) o también el Dios de la
Iglesia Católica. Este Demiurgo habría creado este mundo de dualidad-
paradójicamente mal y a la vez bien hecho, - cargado de bondad y maldad, por lo
tanto es un Dios ciego y malévolo por haber creado este mundo de materia.
Tampoco los Cataros creían en la crucifixión de Jesús, al igual que los
primeros Gnósticos y la tradición de los Nazarenos. Tenían también la
concepción de que el Verdadero Dios esta mas allá de este mundo, por lo tanto,
lo que hagamos o no en este mundo no tiene la mas mínima importancia para Dios.
Solamente debemos tener la concepción de que debemos prepararnos para el
encuentro con el GADU a su debido tiempo. Tampoco ellos reconocían Sacerdocio,
pero si distinguían entre los "Creyentes" y el circulo mas hermético
que encerraban las enseñanzas iniciáticas. Qué bien que se plantee la existencia
de un ser supremo, mas sin embargo al tratar de relacionar a ello , el
conocimiento existencial energético del cosmos , creo que a veces es mejor
tratar de diferenciarle. Es como si al principio, hubo una gran explosión de
gran energía, que se diseminó por todo el universo, mas sin embargo tarde o
temprano se tendrá que volver a juntar, y todo lo bueno y malo que existió en
ella, se volverán a mezclar en ese magma de status quo.
La humanidad de hoy en día representa
una etapa primitiva en el logro de esta tarea. La inteligencia tan elevada que
estoy postulando no es ni humana, ni divina. Tampoco es omnipotente, ni
infalible, pero su visión y sus poderes trascienden en mucho al de la
humanidad. Era natural que se pensara en el Gran Artífice como el principal motor,
la fuente trascendental de la cual fluía toda la existencia.
En dos mil trescientos años ha habido
cambios muy grandes en nuestra imagen del mundo. Einstein, Copérnico y Galileo
nos hicieron ver a la Tierra como un complejo y energético planeta más en la
creación. La Astronomía moderna nos dice que miremos al Sol como una estrella
entre cien mil millones que forman nuestra galaxia, y a nuestra galaxia como
una entre incontables millones de galaxias extendiéndose más allá de lo que
nuestra imaginación puede alcanzar. Estamos obligados a pensar muy diferente
acerca de una inteligencia, si es que hay una, que gobierna nuestra Tierra, y
de una que gobierna el Universo. Manteniendo la palabra Demiurgo para el
espíritu de la Tierra postulado, podemos hacer a un lado, como algo que está
más allá de nuestra comprensión, la idea de una deidad que creó y gobierna el
Universo Al hacer esto, deberíamos dar un suspiro de alivio y gratitud.
La Tierra es nuestro hogar y su destino
debería ser nuestro mayor interés. Debemos recordar que la concepción de un
dios absoluto fue extraña a todos los pueblos antiguos. Jehová fue el dios más
grande, pero limitado tanto en sus poderes como en sus asuntos. Lo mismo era
Ahura Mazda. El Buda aceptó la existencia de dioses pero los contemplaba como
limitados y por ninguna razón omnipotente. Los primeros cristianos mantuvieron
el concepto judío de un dios limitado.
La influencia del pensamiento Griego fue
lo único que igualó a dios con el Absoluto. Si podemos aceptar la noción de un
dios cortado, estamos obligados a admitir la noción de una fuente imitada
"más allá de Dios".: "Dios es amoroso pero no omnipotente, u
omnipotente pero no amoroso. Él no puede ser ambos".
La verdad es que la omnipotencia de Dios
es una idea absurda pensada por hombres con mentes lógicas estrechas. Debe ser
obvio para cualquiera cuyos sentimientos no se han atrofiado, que el amor y la
omnipotencia nunca pueden estar unidos. Cuando me convencí de que existe una
inteligencia, grande y benevolente pero limitada, trabajando detrás de la
escena de este mundo, y cuando también vi que el hombre no puede existir sólo
para su propio beneficio, sino que debe haber sido oreado para servir a algún
propósito superior, experimenté un enorme alivio. La vida podría estar llena de
sentido y yo podría desempeñar en ella un papel útil e incluso necesario debido
a que no está controlada por el poder abrumaste de un dios todopoderoso. La
imagen que se nos enseñó a través de la historia de la Tierra es la de una
transformación lenta pero acelerada, desde la carencia de vida a la vida, de la
sensación primitiva a la conciencia desarrollada.
La transformación ha avanzado de manera
incierta y aún precaria, pero el resultado constituye una maravilla. Vemos la
adaptación sorprendente de la vida a la naturaleza del planeta, de una forma de
vida a otra. Contemplamos el ingenio máximo en la construcción, vemos belleza y
podemos ver el plan de un espíritu cósmico. Si todo esto llegó a existir a
ciegas, por el trabajo de leyes mecánicas y combinaciones accidentales,
constituye una maravilla doble. Si lo vemos como el logro de una gran
inteligencia, debemos estar listos para inclinamos ante ella y reconocer que es
incomparablemente más grande que nosotros. Cuando miramos el sistema solar,
vemos una familia enlazada muy estrechamente, formada por el Sol, los planetas,
satélites, asteroides, cometas y campos de fuerza. Sabemos que la vida en. Ya
Tierra depende del calor, la luz y otras radiaciones que recibe del Sol. Los
científicos están de acuerdo en que la luz del Sol debe tener un papel decisivo
en la primera aparición de la vida en este planeta.
Quisiera ir más lejos y pedirles que
piensen en términos del Sol como una inteligencia superior, como el poder
creativo que actúa en todo el sistema solar. Podemos contemplarlo como el
creador y el padre de toda la vida, incluyendo la propia. Comparado con el Sol,
el Demiurgo ocupa una posición subordinada. En sí mismo no crea la vida, pero
ha emprendido la tarea de cuidarla y guiarla hasta el momento en que pueda
volverse responsable por sí misma. No hay porque asombrarse de la idea de una
inteligencia detrás de la naturaleza. Los biólogos, quienes rechazarían
cualquier sugerencia acerca de un creador divino, se encuentran hablando y
escribiendo sobre la naturaleza como si fuera un ser inteligente. Es difícil
que uno abra un libro o lea un escrito sobre la evolución de la vida sin
encontrarse pasajes en los que el autor personifica a la naturaleza. Si se le
pregunta, nos asegurará que es sólo una figura del lenguaje y que no debe
tomarse literalmente. Sin embargo, algunas veces nuestro lenguaje nos
traiciona; decimos cosas más verdaderas de lo que intentamos.
Conforme sepamos más y más acerca de la
vida, llegaremos con toda seguridad a la conclusión de que hay una inteligencia
detrás misma, y por consiguiente, deberíamos separar la naturaleza del
Demiurgo. El Sol fue el creador del patrón eterno de la vida. A través de la
vida, el alma pudo aparecer y la Tierra misma se transformó en un ser divino,
volviéndose la desposada del Sol. La Tierra como una inteligencia pura sin
mente y sin un cuerpo viviente, pudo aceptar la intención del Sol, pero no pudo
realizarla en el mundo existente. Por consiguiente, la tarea fue asignada al
Demiurgo, a quien uno puede percibir en los mitos de la creación de muchas
culturas. Le pido al lector mirar esto como historia. El mito y la historia son
hermanos gemelos; representan el rostro ideal y el verdadero de la misma
realidad. No obstante, la diferencia es importante, porque la historia nos
conecta con el pasado y el futuro, mientras que el mito pertenece al presente
eterno. En este capítulo estoy resumiendo una presentación de ideas que se
puede encontrar en detalle en mi libro Dramático, por consiguiente, no estoy
escribiendo todo esto para convencer al lector, sino para dejar establecido un
lenguaje con el que pueda hablar con libertad sobre la forma en que miro el
mundo.
Tenemos cuatro conceptos. El primero es
el de una Fuente Insondable absoluta de la que procede todo el Universo
existente. Debemos postular esa fuente debido a que hemos separado el sistema
solar, como nuestro propio tema de estudio, del Universo, en el cual es tan
diminuto y en apariencia insignificante. Al hacer esta separación, tenemos que
ver al sistema solar como una unidad completa en sí misma, con su propia
inteligencia presidiendo, el Sol, en quien podemos pensar como un dios, creador
y padre de la vida en la Tierra, y como un gobernante del sistema solar. Si
reflexionamos a profundidad, veremos que es posible que nos formemos la
concepción de un ser supremo, de quien depende toda criatura viviente mientras
permanezca dentro de los límites del sistema solar.
Cuando llegamos a esta Tierra, tenemos a
la naturaleza, a veces mencionada como la Gran Naturaleza. Vernadsky llamó a la
capa de vida que cubre la Tierra "biósfera", y él y muchos otros
científicos están listos a contemplar la biósfera como una unidad que es un
ser. La cuarta concepción es la de la inteligencia Demiúrgica, de la naturaleza
en el planeta.* Debo, antes de continuar adelante, ubicar la imagen del
Demiurgo dentro de un mejor En este punto llegamos a enfrentarnos a un problema
inesperado: Demiurgo en singular pero encontraremos necesario pensar también en
inteligencias el pensamiento lógico ortodoxo es atómico y tendemos a considerar
un número como teniendo una cualidad absoluta, hallamos irrazonable suponer que
alguna cosa puede ser una y muchas al mismo tiempo. Por ejemplo, podemos
admitir que el cuerpo humano es un todo pero también que es una multiplicidad,
consistente de extremidades, órganos, sistemas, y partes grandes y
pequeñas.
Esta relación de todo y de uno y muchos,
sin que los muchos estén subordinados al uno, o el uno se contemple como la
suma de sus partes. Se podría encontrar una mejor analogía con el color: Existe
un color al que llamamos "azul", y cada superficie que tiene un color
azul es tan azul como cualquier otra. Donde está presente el "azul",
está presente por completo; tamaño y número no tienen nada que ver con ser
azul. Tenemos que efectuar un salto mental y pensar acerca de la. El Amor viene
de más allá de los límites de la creatividad del Sol. El amor es inherente a la
vida, y es desde adentro de la vida que el amor puede actuar.
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