Escribe: Herbert Oré Belsuzarri
Masón Peruano de Fenix 137-1
Masones
y profanos vemos en forma cotidiana en diferentes lugares, objetos y joyas un símbolo
cuya identidad es universalmente conocida: La Escuadra y el Compas, pero se ha detenido
para averiguar ¿A cuantos grados esta
abierto el compas y porque?
Un
punto que da lugar a una aproximación particularmente significativa entre la
tradición extremo oriental y las tradiciones iniciáticas occidentales, es el
que concierne al simbolismo del compás y de la escuadra: éstos, como ya lo
hemos indicado, corresponden manifiestamente al círculo y al cuadrado, es
decir, a las figuras geométricas que representan respectivamente el Cielo y la
Tierra. En el simbolismo masónico, conforme a esta correspondencia, el compás
está colocado normalmente arriba y la escuadra abajo; entre los dos está
representada generalmente la Estrella irradiante, que es un símbolo del Hombre,
y más precisamente del «hombre regenerado», y que completa así la
representación de la Gran Tríada. Además, se dice que «un Maestro Masón se
encuentra siempre entre la escuadra y el compás», es decir, en el «lugar» mismo
donde se inscribe la Estrella irradiante, y que es propiamente el «Invariable
Medio»; así pues, el Maestro es asimilado al «hombre verdadero», situado entre
la Tierra y el Cielo y que ejerce la función de «mediador»; y esto es tanto más
exacto cuanto que, simbólica y «virtualmente» al menos, si no efectivamente, la
Maestría representa la culminación de los «pequeños misterios», donde el estado
del «hombre verdadero» es el término mismo; vemos allí un simbolismo
rigurosamente equivalente al que hemos encontrado precedentemente, bajo varias
formas diferentes, en la tradición extremo oriental. (Rene Guenon,
Entre la Escuadra y el Compas).
Es indiscutible que los dos símbolos de las herramientas
masonicas de los masones lo constituyen la escuadra y el compás, sobre ello se ha dicho que
expresa el origen filosófico de la Masonería y sus ideales.
La Escuadra y el Compás, permite la realización de tareas
que competen a dos estructuras completamente diferentes y contradictorias: el
cuadrado y el círculo. Si ignorásemos cualquier otro instrumento propio de las
Logias, bastaría con conocer el cometido de la Escuadra y del Compás para
reconstruir a partir de ellos toda la filosofía Masónica.
Se
señala que sin estos dos
instrumentos, no sólo sería incomprensible el simbolismo de las Logias, sino
que ni siquiera hubieran sido alzadas nuestras más hermosas catedrales o las
construcciones que asombran al mundo pese al tiempo transcurrido en diferentes partes
del mundo.
Tal es su valor que los sistemas de enseñanza no
pueden obviar la Escuadra y el Compás,
que son útiles que acompañan a todo escolar desde sus primeros años de
aprendizaje, y sin embargo, nunca hacen una reflexión sobre ellos no obstante que
durante años el niño deberá utilizarlo.
CONTINUÉ SU LECTURA EN:
Interesante articulo pero hay algo que no comparto. Casi al final habéis escrito lo siguiente:
ResponderEliminar...es 33, como el número de Grados de la Masonería...
La Masonería no tiene tres grados, es el Rito REAA el que posee los 33 grados pues otros ritos como el Frances, el egipcio, etc, varían mucho en esto.
Desde mi punto de vista, la Masoneria posee solo tres grados: aprendiz, compañero y maestro. Siendo el resto, hasta los 33 del REAA o los que sean de otros ritos, complementos o grados filosóficos.
Completamente de acuerdo con lo vertido por vos. De eso precisamente se trata cuando uno expone una idea, que sea complementado por nuestros HH:. para mejorarlo.
ResponderEliminarTAF