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miércoles, 16 de julio de 2014

El Friso Maya y el Diluvio Universal

El Friso Maya y el Diluvio Universal

Imagen
Por Rudy Erös
EL DILUVIO UNIVERSAL 
Un evento cíclico

 
A veces las evidencias que podrían corroborar una determinada historia se escabullen para tornar esa historia aún más enigmática e improbable de lo que por si misma parece. En otros casos las pruebas resultan ser tan endebles como la evidencia que en este caso nos acompaña: una simple fotografía. Sin embargo la historia de este retrato en sí es tan interesante como lo que en él vemos (Hacer click en la fotografía para ver en detalle). Teoberto Maler es el responsable de esta captura fotográfica. El fue un personaje más que interesante, el cual dedicó gran parte de su vida a explorar y documentar la cultura maya plasmada en inmortales construcciones de piedra legadas a la humanidad futura. Era arquitecto e ingeniero, por lo cual podemos imaginar su enorme interés por las construcciones piramidales de la antigua cultura centroamericana. Fué uno de los primeros, si no el primero, en tener un concepto moderno de la preservación arqueológica dado que se disgustaba con los exploradores de su época quienes arrebataban inescrupulosamente objetos y piedras grabadas de las ruinas; Maler consideraba que los sitios arqueológicos debían permanecer intactos, por lo cual es considerado un precursor de la disciplina arqueológica moderna. El prestigio de Maler es indiscutible al punto que uno de los complejos de edificaciones en Tikal lleva su nombre: Complejo Maler. El dejó su firma grabada en una de las paredes de roca de una de las estructuras principales de la acrópolis central, inmortalizando así su presencia en el sitio. 
 
La fotografía
 
La foto tomada por Maler nos muestra una escena por demás sobrecogedora, intrigante y a la vez familiar. Un hombre ataviado indudablemente con vestimenta de la cultura maya, se encuentra en una canoa escapando de una situación escalofriante: un gran cataclismo, el cual se hace evidente en la erupción del volcán que está al fondo y otros más allá del horizonte; la portentosa actividad sísmica está presente en el derrumbe de una pirámide justo a la izquierda del volcán. Las consecuencias de un poderoso tsunami se pueden apreciar en la persona que flota en las aguas a la deriva; y el pez muerto, símbolo de un gran desastre ecológico marino. Otros detalles de la fotografía serán considerados más adelante. ¿Pero por qué esta fotografía debería considerarse una excelente evidencia en vez de una prueba endeble? Para responder esta pregunta debemos remitirnos a un posible amigo de Maler, el arquitecto inglés Robert Stacy-Judd , quien utilizó dicha fotografía en un libro que este publicó en 1939 “Atlantis: Mother of Empires”. Aparentemente la foto original habría estado en poder del propio Robert Stacy-Judd y según declaraciones del propio Stacy-Judd, antes de morir Maler habría revelado que lo que muestra la fotografía es sólo una porción de un extenso friso que circunda la totalidad de una cámara subterránea. No deberíamos dudar que el arquitecto inglés dijo la verdad, pero además conociendo su inclinación e interés por el arte maya, deberíamos sospechar que si Maler le confió la ubicación de esa cámara, Stacy-Judd jamás revelaría su ubicación sin antes ser el ‘primero’ en llegar hasta ese lugar perdido en las selvas guatemaltecas. Pero eso tal vez nunca lo sabremos.
Tampoco sabremos si esa información “llegó” o fue comprada por algún coleccionista privado o algún testaferro de la NASA. ¿La NASA? ¡Sí la NASA!  Muchas personas piensan que a ese organismo del “gobierno” estadounidense sólo le importan los viajes espaciales y la puesta en órbita de satélites artificiales; sin embargo ya sabemos con certeza que en los años 70s, más precisamente en 1976, una expedición patrocinada por la NASA y comandada por el ex astronauta Neil Armstrong exploró la Cueva de los Tayos, en Ecuador, donde el húngaro-argentino Juan Moricz había descubierto años atrás a un grupo de aborígenes que hablaban el antiguo idioma húngaro y eran los guardianes del acceso a una cueva que según Moricz recorría las entrañas de la cordillera de los Andes y donde se guardaban unas planchas de metal con extraños símbolos jamás descifrados. Armstrong dijo posteriormente que nunca encontraron nada, lo cual contradice sus primeras declaraciones donde aseguró que aquella experiencia había sido más sorprendente que su viaje a la Luna. No cabe duda que “alguien” aconsejó a Armstrong rectificar sus declaraciones pues fuera lo que fuera lo que el ex astronauta vio en la Cueva de los Tayos, esto no era algo que debía cederse al dominio público. Entonces, volviendo a nuestra fotografía del friso maya, si la NASA o algún otro grupo con oscuras intenciones de desinformación se apoderó literalmente del sitio descubierto por Maler, jamás sabremos algo acerca de esas ruinas. Pero hay una pregunta que no puedo dejar de hacerme y que a la vez quiero dejar flotando en la mente del lector ¿El resto del friso donde Maler tomó la foto del escape, contenía alguna información que relacione ese evento con el fin del calendario maya?
 Historias paralelas
  
En algunas páginas de internet hay quienes aseguran que Maler llevó el segmento de roca a alemania y que estuvo expuesto en el Museo de Berlín hasta que en la Segunda Guerra Mundial, tras los bombardeos, la pieza invaluable se habría perdido. Yo creo que conociendo la postura conservadora que tenía Maler, según lo mencioné más arriba, sería bastante difícil creer que la estela fuera llevada a Alemania por él mismo usurpando así el contenido de un sito arqueológico. Confirmar la presencia del fragmento del friso en el museo alemán es una asignatura pendiente que constará en contactar personal de archivo del Museo de Berlín que pueda confirmarlo. Sin embargo más allá de que pueda probarse la existencia físca del segmento de friso en el museo antes de la guerra, en base al prestigio y antecedentes de Maler, no tengo dudas que la fotografía es absolutamente auténtica y con ella nos bastará para encarar los diferentes temas que a partir de esa imagen podemos interpretar.

Por otro lado, suponiendo que la historia de la existencia del friso en el museo alemán fuese cierta, eso no necesariamente querría decir que Teoberto Maler contradijo sus propios principios de conservación arqueológicos; ya que la roca podría haber sido llevada al museo por ‘alguien’ más a quien Maler podría haber confiado el secreto de la ubicación del sitio, y esta persona a su vez llegar hasta allí, remover el trozo de friso y levarlo hasta Alemania después de la muerte de Maler en 1917. Recordemos que si, como se dice, el objeto permaneció en el museo hasta 1939, pasaron muchos años desde el fallecimiento de Maler y esta podría ser la mejor evidencia de la presencia de “otra mano” en el traslado de la pieza desde su lugar de origen. Cuando decimos que la pieza se “perdió” no necesariamente queremos decir que se destruyó sino que esa “mano” de la que hablamos antes hizo que la pieza pase a la clandestinidad. Y para adelantarme a quienes creen que esa es una presunción muy retorcida o improbable, quiero recordarles que ya vimos actuar a esa “mano” en la invasión estadounidense a Iraq; durante la llamada Tormenta del Desierto y después de ella, unas 15 mil piezas  desaparecieron del Museo Arqueológico Nacional de Iraq. Para información de quienes piensan que “desaparecieron” porque fueron destruidas por los bombardeos tengo que decirles simplemente que no sean ilusos, ya que algunas de esas piezas fueron ‘recuperadas’ misteriosamente gracias al accionar de diferentes organismos internacionales. Pero muchas, la mayoría y quizás las más importantes, jamás aparecieron y jamás aparecerán. Esto abre una pregunta que todos deberían hacerse (yo conozco la respuesta gracias a una fuente por demás confiable) ¿EEUU invadió Iraq sólo por el petróleo? Para quienes tengan la inquietud, pueden investigar acerca de la enorme cantidad de soldados arqueólogos que el gobierno estadounidense llevó a Iraq. ¿Para qué? ¿Qué ‘objeto’ arqueológico estaba (o está) buscando la CIA en Iraq? ¿Si el objetivo de la guerra era erradicar la presencia de Al Qaeda para qué tantos arqueólogos? Mi fuente habló acerca de unos “planos” o una “llave” para acceder a un portal dimensional. Pero.. ¿Quienes pueden haber dejado semejante legado? ¿Los sumerios? Probablemente SI.
Los dioses Anunnaki deben haber dejado algo muy valioso que las elites de la realeza británica y sus primos estadounidenses conocen desde hace tiempo y por alguna razón decidieron que en esta época debería ser encontrado y expropiado . De hecho, pueden acceder al sitio web del museo de Iraq y constatar a través de decenas de fotografías la enorme presencia militar estadounidense durante la recuperación de piezas arqueológicas entre las cuales se encontró una máscara o imagen de la reina sumeria Nin.Puabi junto con muchos otros objetos personales de esta dama sumeria. No voy a darles el link directo para que tengan la experiencia de acceder a las fotos por ustedes mismos. Simplemente entren en la página del Museo Arqueológico Nacional de iraq http://www.baghdadmuseum.org/ y busquen al pie de la página el enlace “The secret of Nimrud”. Observen cuidadosamente la gran cantidad de fotografías y pregúntense ¿Qué hacen allí tantos militares de rango involucrados en algo que es trabajo exclusivo de arqueólogos? 
[Zecharia Sitchin, el autor de "El 12º Planeta" e intérprete de las tablillas sumerias quien ha contado al mundo la historia de los anunnaki (los que del cielo vinieron a la tierra) y la creación del hombre desde reingeniería genética hace miles de años, curiosamente dejó pendiente justo antes de su muerte en octubre del año 2010, un pedido de análisis de ADN de los huesos de la reina/diosa Nin.Puabi, dado que él estaba convencido que esos estudios podrían revelar la ascendencia mitad humana y mitad anunnaki de la reina. ¿Casualidad?.  Los familiares que continúan con el trabajo de Sitchin han iniciado los trámites ante el Museo de Historia Natural de Londres, pero los tiempos de espera van a arruinar los nervios de quienes esperamos con ansias esos resultados. Los intereses/agenda detrás del gobierno inglés y norteamericano probablemente impedirán que esa investigación salga a la luz.]
 El Gran Diluvio, del mito a la realidad
 
Desde que Zecharia Sitchin develó a través de sus libros de la serie ‘Crónicas de la Tierra’  las historias que hace miles de años nos legaron los sumerios, muchos nos quedamos atónitos al descubrir que ya los sumerios mucho antes que el pentateuco contenido en la Biblia, describían los acontecimientos de un Gran Diluvio cuyos detalles antes y después del mismo son mucho más numerosos y con una riqueza de información que nos aclara muchas incógnitas que el relato de Noé ha dejado planteadas. Mientras que el relato del Diluvio Universal bíblico se presenta como un hecho casi aislado y con poco detalle, la historia de Utnapishtim (el Noe sumerio) tiene un sentido de conexión total con los acontecimientos antes y después del cataclismo que provocó la gran inundación en todo el planeta.
 
La ciencia siempre ha decretado como mito tanto a las historias contenidas en la Biblia como los acontecimientos de los orígenes de la humanidad descritos en las tablillas de escritura cuneiforme dejadas por los antiguos sumerios. Según Zecharia Sitchin es este justamente el gran obstáculo para comprender nuestros origenes, es decir, tomar esas historias como mito en vez de como una fascinante cosmogonía. Siguiendo el razonamiento de Sitchin al tomar todas las historias que nos cuentan los sumerios sobre los orígenes de la humanidad como reales, todo se hace claro y las piezas del gran rompecabezas del enigma de la existencia comienzan a encajar. Incluso la personalidad cambiante del dios de Israel, el ora bondadoso ora inmisericorde Yaveh, encuentra una explicación casi obvia a la luz de los relatos que los sumerios dejaron acerca de sus dioses anunnaki. Quienes no conozcan aún la obra de Sitchin deberían acercarse a sus libros comenzando por el primero de sus trabajos “El 12º planeta”. Pero no es mi intención desglosar la obra de Sitchin en este escrito sino sólo utilizar los contenidos que nos interesan a fin de corroborar la realidad del Gran Diluvio en el pasado y la inminente cercanía de un evento similar en los próximos años de esta primera mitad del siglo XXI. Para saber cómo enfrentar un evento catastrófico de tal magnitud, la única manera es comprender cómo ocurrieron los hechos en el pasado y qué han hecho para lograrlo aquellos pocos privilegiados que pudieron sobrevivir. 
  
Demasiadas coincidencias
 
¿Cómo podemos estar seguros que el Gran Diluvio fue real y no una simple historia o mito inventado por culturas milenarias?  

La primera vez que vi la foto tomada por Teoberto Maler quedé en shock. Supongo que el propio Maler debe haber sentido algo parecido cuando se encontró con ese tramo de friso en aquella cámara construida por los mayas. Mi mente comprendió en ese instante que la historia del diluvio contada por las culturas del Oriente Medio no fué un hecho aislado sino un verdadero acontecimiento universal. Todo el mundo había sido afectado por el cataclismo y si eso era cierto, así como los mayas habían dejado un testimonio del mismo grabado en piedra, otros pueblos americanos y de otras latitudes deberían haber hecho algo similar.
Comencé a buscar información al respecto y ante mi asombro descubrí el trabajo de no uno sino varios antropólogos e investigadores alrededor del mundo, quienes habían recopilado pacientemente el relato de un ‘gran diluvio’ transmitido de generación en generación, de boca en boca, por los ancestros de diversos pueblos aborígenes de todas partes del mundo. Para entonces la idea de mito en relación a un Diluvio Universal, aunque nunca pensé que lo fuera, quedó en mi mente totalmente descartada para siempre. A partir de allí comprendí que ese acontecimiento fue tan real como el sol que nos ilumina cada día y algunos eventos de mi niñez relacionados con esto comenzaron a cobrar vigencia en mi memoria y a tener un sentido alarmante y al mismo tiempo revelador. 
http://eldiaqueellosvuelvan.wordpress.com/2012/08/08/el-friso-maya-y-el-diluvio-universal-13-2/

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